viernes, 15 de febrero de 2008

Me lo explicó.

Ocurre que a veces me canso de hablar frente a la pared, gritar, escupir, y demás cosas. A veces simplemente hay que despegar, y salir de frente, poner primera y marchar, tomar la decisión seguros (aunque no lo estemos, definitivamente) y seguir el impulso que dará por resultado el despliegue de las alas, y luego planear en paz.
Sigamos el curso aparentemente correcto, descubrirse la piel.
Es un momento, y entonces acabarán por tomarnos por verdaderos.

2 comentarios:

Camos dijo...

un dia nos vas a cagar a tiros a todos.


Suerte con tu mudanza! :)

BoneMan dijo...

El viejo sabe...
Esos arranques terminan contra la pared.
Son buenos, son necesarios, son inutiles.